Vida útil de una alfombra

Una buena alfombra puede durar entre 5 y 15 años, ¡o incluso más! Pero, como en todo, depende de varias cosas, como el tipo de material, qué tan densa es, y sobre todo, de cómo la cuides.

Primero de todo, la calidad importa. Si tienes una alfombra hecha con materiales resistentes y de buena calidad, es probable que te dure más. Las de lana o ciertas fibras sintéticas top suelen ser como el buen vino, mejor con el tiempo.

Otro punto a tener en cuenta es el tipo de fibra. Las de nylon y poliéster son como los guerreros de la resistencia contra el desgaste y las manchas. Mientras tanto, las de algodón son más delicadas y pueden cansarse más rápido.

El grosor también juega un papel. Las alfombras más mullidas y densas tienen más «musculatura» para resistir el paso del tiempo, o mejor dicho, de los pies.

Ah, y el tráfico. Las alfombras en áreas de mucho trajín, como pasillos y salas de estar, pueden envejecer más rápido que las que están en rincones más tranquilos.

Pero aquí viene la parte importante: ¡el cuidado! Si mimas tu alfombra con limpieza regular, aspiración y combates las manchas como un héroe, seguro le alargas la vida.

¿Y qué más? Pues las condiciones del entorno también cuentan. La humedad, la luz directa del sol y cambios de temperatura pueden hacer que tu alfombra se sienta incómoda, así que trata de darle un ambiente agradable.